Cuestionar la realidad

Cuestionar la realidad

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El pensamiento crítico, ver las cosas desde diferentes puntos de vista, caminar senderos propios y ajenos, son las mejores herramientas para avanzar. En estos dos poemas describo los colores blanco y negro desde otro punto de vista. Al fin y al cabo, las palabras nombran sucesos que adquieren infinitos matices que se posicionan en una línea temporal. Cada uno de nosotros observará esa manifestación del concepto abstracto en sí. Esto sugiere una máxima vital: la realidad, tal y como la conocemos es una ilusión.

Blanco

 

El blanco es

el color de la muerte,

repele todos los colores,

es la representación

más exacta del vacío.

 

El blanco es  ausencia,

nada existe que sea

de blancura absoluta,

nada.

 

 

Negro

 

El negro es un arcoíris

intenso y saturado,

es la oscuridad en el vientre

de una madre,

es un beso,

cuando se da con el alma.

 

Es el color del universo,

el negro, tan repudiado,

es la razón por la que pueden

brillar las estrellas.

LUNA

LUNA

ClaraLorca

En la vida se aprende que hay que valorar los propios dones, pero en el transcurso del desarrollo personal, nos encontramos admirando dones que no poseemos. A veces, los adquirimos después de trabajarlos, en otras ocasiones, no los deseamos de corazón, lo que deseamos es sentir la fortuna que creemos que siente al tenerlos la otra persona. Quizás incluso, deseamos una característica física del otro, despreciando lo que la naturaleza nos entregó. Todo ser vivo posee su propia singularidad y belleza. 

Una luna naranja,

hirió con luz

el cielo nocturno.

 

Arrebatar el protagonismo

de las miles de estrellas,

eclipsar la naturaleza

de su fulgor.

 

La luna,

sin luz propia,

refleja al sol,

apropiándose de su brillo.

 

La luna naranja,

hiere en la noche a las estrellas,

mañana será blanca,

pasado, amarilla.

 

Llorará día tras día,

al desaparecer en el alba,

por no saber que es bella,

aunque no creé luz.

El cuadro que acompaña al poema es de mi compañera de estudios, cuando cursamos bachillerato en la Escuela de Artes y Oficios de Granada. Ella es Clara Lorca, podéis ver parte de su obra en su web http://www.claralorca.com/ Si estáis por Granada en septiembre pasad por http://mileniumgallery.com/ (en calle Puentezuelas) y podréis ver su exposición «MICROCOSMOS».

 

Soy la búsqueda

Soy la búsqueda

marisalmeron

 

Busco ir más allá de lo visible, busco la comprensión de la realidad en todos sus matices. Es una búsqueda vital que terminará (o no) en el día de mi muerte.

 

Somos “nada” en la noche oscura,

soy vacío sin tu verbo,

en la lluvia me diluyo,

para desaparecer en el silencio.

 

Siempre mirando a los ojos,

para seguir creyendo,

que sólo existo,

en la luz que veo en ellos.

 

El grito en mi garganta,

se ahoga en un momento,

con la melodía de fondo,

que generan mis recuerdos.

 

Soy la búsqueda incesante,

de un río que es eterno,

aquel que por el cielo fluye,

para expandirse por el universo.

El poema está ilustrado con un cuadro de mi amiga María Salmerón. Podéis ver parte de su obra aquí.

MEA CULPA

MEA CULPA

Joséángeles

La vida nos pone retos, y no siempre los aceptamos con valentía. La auto crítica, ese veneno fatal que enturbia nuestros logros. El «nunca es suficiente», la apreciación de que uno no es todo lo bueno que le gustaría en su trabajo… Incluso el maltrato hacia uno mismo por la insatisfacción de las metas no alcanzadas. Y con ese ansia de perfección nace este poema, en un ataque de rabia hacia el alma asustada que en mí habita.

Mis sueños,

llenos de humo,

humo gris, opaco,

para que no se vea

qué hay en ellos realmente.

 

La soberbia es la que habla,

la rabia, la que llora,

el miedo, lo que persiste.

 

Me quité la máscara,

para ser libre,

y lo que debajo vi,

no lo soporto.

La imagen que encabeza este post, es de mi amigo José Ángeles Alejo, magnífico escultor del que me considero fan incondicional. En su web http://www.jose-angeles.com/  podéis encontrar parte de su obra.

El refugio del alma en los libros

El refugio del alma en los libros

charles-baudelaireCharles Baudelaire se convirtió a mis 16 años con sus Flores del Mal, en uno de mis libros de cabecera. He sido, creo yo, una lectora precoz. A los 13 años me entregaron la colección de libros de mi padre y ahí comenzó todo, pasando de los libros infantiles a la literatura en mayúsculas. Claro que, con 13 años comencé por algo más ¿suave? Becquer, Ruben Darío, Espronceda, Lorca… luego vino Garcilaso de la Vega, Quevedo, Góngora… (el preludio de muchas lecturas posteriores de otros poetas que ya adquirí por mi cuenta). La poesía siempre ha sido ese lugar en el que me hago fuerte. Con las lecturas de Baudelaire (la poesía es lo que tiene, que puedes volver a ella y siempre tiene algo nuevo que mostrar) nació este poema.

El Ángel de fieros ojos,

con sus flores me habló,

de lo prohibido y lo profano,

de la melodía que desprende la muerte.

 

El SEXO, catarsis

de la irracionalidad humana,

nos hace olvidarnos,

de nuestra insoportable REALIDAD mundana.

En el primer verso, presento a Baudelaire como «El Ángel de fieros ojos», esto es por uno de mis poemas favoritos de Las flores del mal, Le revenant, o El Aparecido. En mi ejemplar se traducen así los primeros versos:

«Como un ángel de fieros ojos

Me apareceré en tu alcoba

Deslizándome en silencio

Con las sombras de la noche.»

 

 

A song for the lovers

A song for the lovers

puerta

El título de esta canción de Richard Ashcroft y su vídeo me inspiró este poema. El tema me pareció una metáfora grandiosa de lo que por aquel entonces percibía del amor. Una sensación de impotencia, quedarme  tras la puerta, a la espera de que alguien me amase por quién era yo realmente, y esa espera hacía que mi mente lógica me convenciera durante casi todos los años de mi vida de que el amor romántico es solo un amargo preludio hasta el inevitable final.

 

Como una sombra que no llega a producirse,

los amantes se llenan de expectativas,

brindando al destino con copas cargadas de aire.

 

Ella espera junto a la puerta,

nunca llegará a traspasar el umbral,

solo existe la ilusión del momento.

 

El preludio insoportable de la espera,

ese instante agridulce,

no hay nada más.

 

Desprecio a uno mismo

Desprecio a uno mismo

Afrodita-Cnido-Praxiteles  La sociedad se ha encargado con la publicidad de que mujeres y hombres odiemos nuestro cuerpo. He llegado a querer arrancarme trozos de mí, a odiarme profundamente. Ahora me apena imaginarme años atrás, en plena juventud, con ese sentimiento tan destructivo, esa meta imposible de falsa perfección. Nuestro cuerpo es un templo, hay que amarlo tal cual es.

Bloque de mármol,

esperas ser tallado,

quieres ser cualquier cosa,

excepto tú.

 

Esperas que a golpes,

te separen la piedra,

para mostrarte,

sólo tú.

 

Y ahora,

piedras rotas,

te rodean,

cubriéndote de gloria.

 

¡Enhorabuena!

Ya eres polvo,

ya eres nada,

ya, no eres tú.

Realidades cuánticas

Realidades cuánticas

universo

Los descubrimientos en física y mecánica cuántica, las nuevas comprensiones del universo… sigo desde hace años estos temas de cerca. Es algo que me atrapa y que no deja que mi mente pare de explorar en este horizonte de sucesos. Estamos ante una revolución en todos los sentidos, pero esta luz tan intensa ciega a muchos que no ven más allá de su EGO.

Caminando en una nube de electrones,

Inmersa en una realidad que no captan mis ojos,

Viendo lo que mi humana mente procesa,

Que no es más que una ilusión de color y forma.

 

Soy una unidad de carbono sobre la tierra,

Alimentándome de vida y muerte para sobrevivir,

Sintiendo distancia energética entre mis iguales,

Soñando ventanas abiertas a la libertad.

 

Las cadenas que me oprimen son invisibles,

Lazos sangrientos regalados al nacer,

Cárcel de huesos que me detiene,

Cuando mi mente vuela y no quiere volver.

 

La bóveda celeste me reclama,

Con el hipnótico brillo de sus estrellas,

Me recuerdan que un día,

Fui y seré parte de ellas.

La sensación de que nada llega…

La sensación de que nada llega…

Cuando tenía 19 años escribí este poema. Sentía una angustia indescriptible, una sensación de no avanzar a la velocidad que yo quería. Un bloqueo que paralizaba mi proceso evolutivo, una pena infinita que nunca me abandonaba, una incomprensión absoluta del porqué del comportamiento de los demás…

Tiempo, mortal enemigo,

me hieres con tus horas muertas,

desintegras mis sueños,

arrancas mis creencias.

 

Interminable es tu drama,

donde a tus actores presentas,

en este eterno teatro,

de vidas paralelas y miserias.

 

Acaricias con tus segundos metálicos,

y desgarras nuestras conciencias,

nos haces impuros, recipientes de vanidad,

almas decadentes “no despiertas”.